Te resolvemos dudas comunes sobre el protector solar.

Ahora que por fin podemos empezar a salir, tenemos que seguir cuidado la salud de nuestra piel. La primavera ya ha empezado y en muchas zonas de nuestro país, ya parece casi verano. Hoy os traemos 7 preguntas bastante comunes sobre el protector solar, para que lo uséis de manera adecuada:

  1. ¿Qué es mejor los físicos o los químicos?

En anteriores blogs hemos tratado este tema. Puedes conseguir una protección total tanto con protectores físicos como químicos, o mixtos. La mayor diferencia entre estos es su composición, ya que los protectores físicos son más naturales, y respetan más la piel. 

Los filtros físicos actúan como un escudo que se adhiere a tu piel y refleja los rayos UVA, mientras que los químicos penetran en tu piel y actúan desde ahí. Por ejemplo, nuestra crema solar es un filtro físico con el que obtendrás una protección total, válida tanto para cara como para cuerpo, y creada a base de ingredientes bio.

  1. ¿Cuándo debo usar el protector, en la playa o antes de salir?

Si se usa un filtro solar físico no es necesario aplicarlo antes de la exposición solar, este tipo de productos protegen de forma inmediata. Nos lo podemos poner tanto en la playa como en casa. 

Sin embargo los filtros químicos se deben aplicar aproximadamente 20 minutos antes de la exposición solar. Igualmente deberíamos aplicar con esa antelación, los filtros mixtos, que combinan químicos y físicos.

  1. ¿En qué orden lo uso, encima o debajo de la hidratante?

En general los productos deben usarse en orden de densidad, del más ligero al más contundente. Como los filtros físicos son ligeramente más densos los aconsejamos como último producto.

Igualmente tenemos que tener en cuenta que la repetición de la aplicación del filtro solar será necesariamente encima de los otros cosméticos.

  1. ¿Si ya estoy bronceado, no necesito protección solar?

Por supuesto que lo necesitas. El bronceado es la respuesta natural de la piel para protegerse, pero eso no significa que no vaya a sufrir más daños. Nunca está totalmente protegida y puede causar lesiones cutáneas y hasta cancerígenas aunque estemos bronceados.

La piel muy bronceada envejece más, está más deshidratada y tiene mayor cantidad de células muertas en su superficie por lo que se verá más rugosa.

  1. ¿Cómo sé que filtro debo aplicarme?

Obviamente, depende del tipo de piel que tengamos, una piel más blanca necesitará más protección que una más oscura.

La norma más adecuada es siempre empezar con filtros solares altos que no sean menos de SPF30 sobre todo en verano. En invierno y sin estar directamente expuesto al sol se puede usar menor protección como podría ser 15.

 

Cuida de tu piel

Empece a utilizarla hace unos tres meses, y se ha convertido en un básico indispensable en mi rutina de cuidados. La recomiendo.

Carla